wibiya widget

jueves, 12 de agosto de 2010

IV: De todo lo malo de mi talento y sentimiento

Niño que con el tiempo te huí 
Pasas y recoges con esos ojos azules 
Algún pergamino que en el pasado te escondí 
Y que guardé entre gavetas y baúles 

No te quiero ya como antes 
Ni siquiera en tu mundo busco un lugar 
Aquel mundo del que nos hicimos amantes 
Amantes puros de ideología vulgar 

No te busco ya en mis noches 
Y en los días otros trechos prefiero recorrer 
Mas tú por necio me vigilas entre coches 
Y sin quererlo me apeteces con recelo a perder 

Tú seguiste con tu vida 
Y mi vida odisea grata siempre fue 
Mantuviste siempre dentro mi partida 
Y extrañamente te asombraste cuando regresé 

Dicen que más químicas no tuviste 
Ni puras eléctricas ni breves sin placer 
Rebuscaste mi piel y a otras heriste 
Mas nunca con nadie te fue digno vencer 

Ahora vienes y en algún bar mis cariños buscas 
Mis poros recorres con tu olfato de hombre 
Con tus labios piensas que me asustas 
Y que de placer me inundarás junto a todo el orbe 

Niño a quien cantaba hecha trizas de mujer 
Viejo majadero que me regañaba por sus instintos deshacer 
No pretendas devolverte a lo pasado 
Y jurarme lo contrario 

Sé que tus deseos la luna despierta 
Y a las noches culpas de tu negligencia 
Pero no por ello al oírte en éxtasis caeré 
No provocas mas que vil nostalgia de un pasado que quemé 

Injustamente lloré por mucho tiempo tu continencia 
Y mis llantos en mi vida se apaciguaron con tu ausencia 
Disfruto de tu grata compañía como amistad inquieta 
Me gusta cuando sonríes y de palabras formas una saeta 

Mas no pretendas distraerme en mi camino 
Yo tengo otro ideal destinado que cobijo 
Y si tu por ello no soportas mi conducta 
Te burlas, mofas sin piedad alguna… 
Yo nada haré más que recalcarte tu ignorancia 
Al amor no conoces aunque me conoces y trates de odiarme por venganza 

Chiquillo majadero que no paras de mirarme 
Buscando con fuego volver a ser mi amante 
Muchacho malo y discordante 
No te empeñes en tenerme y desquiciarme 

Hombre que quise, tiempo atrás, fuera mío 
Naturaleza extraña que la vida acorraló como impío 
No pretendas sobornarte con mentiras la cabeza 
Ya te he dicho que debes seguir hacia delante con fina entereza 

No intentes proclamar que me conoces 
Sabes en el fondo que de mí sólo obtuviste vanas flores 
No huyas impávido buscando más aventuras 
Ellas nunca te borrarán de la piel mis risas, mis caderas y amarguras… 

Ana Lía Casvar 2004

No hay comentarios:

Publicar un comentario