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lunes, 3 de septiembre de 2012

¡Ya no quiero estar involucrada!



Algunas veces en el rompimiento, del lazo que sea pero digamos amoroso en este caso, se dejan retazos sin quebrantar inconscientemente, esperando ¿qué? ¿Un remiendo en la situación? O ¿un estúpido final feliz tipo Disney o alguna novela mexicana? La vida real no tiene clave para generar masivamente dinero, bienes o amor como los SIMs;  ni método predeterminado y automatizado para funcionar, esto a pesar de que muchos individuos parecen máquinas, pero bueno, la vida real es la vida real, se siente real también.

Entonces entre esos hilos que se quedan sin romper hay un sinfín de problemas que uno no ve con anterioridad, problemas innecesarios y estúpidos, porque no son sólo carga energética negativa, no sólo son “cosas” que son mías y dejé ahí pensando que las podía recoger otro día, ¡no! Son también sentimientos y resentimientos que se quedan remojados en agua y que con el paso de los días ese líquido se va poniendo cada vez más fétido.

Lo que pasa es que cuesta entender y hacer entender a la rutina y a la costumbre que las cosas han cambiado, que la vida ha cambiado, que eso que era ya no es y eso que estaba ya no está. Pareciera sonar de pronto como algo muy triste, tal vez la tristeza provenga en el momento en el que eso que teníamos mentalmente seguro para el resto de la vida se hundió en un hueco muy profundo y uno tiene que recurrir al plan B que jamás diseñó porque el amor iba a ser para siempre… Para siempre mientras dura como dicen, “para siempre”, el problema con los para siempre es que sólo vivimos en el momento presente y este momento puede ser eterno pero puede cambiar también.

Siguiendo... ¿El para siempre se transformó a un nunca jamás? Eso tampoco se sabe. El conflicto que hay dentro es cuando le damos longevidad en tiempo y espacio a algo que no debe estar sujeto ni a tiempo ni espacio, como lo es digamos el amor, hablando en una manera muy utópica por supuesto.

Entonces decía que posiblemente la tristeza se genere de cuando algo que sentíamos iba a ser así siempre, simplemente deja de serlo, que proviene cuando en una vida lineal y aparentemente tranquila algo sale de contexto cambiando el ritmo de dicha línea y por ende comienzan a haber picos, y picos, y más picos; hasta que la inestabilidad es tan grande que ya sabemos cuál es el siguiente paso. El rompimiento entonces genera que nos quitemos la zona de confort que habíamos creado para sobrevivir con esa inestabilidad, y eso duele. Duele a veces poco o mucho volver a estar inseguros, duele porque en cierta medida, no sé si sea el corazón o si sea la cabeza o los dos, pero no sabemos qué hacer, tenemos el vaso quebrado en mil pedazos y lo más factible para la cabeza y la rebuscada autodestrucción es remendarlo, así nos sangren las manos. Esto no tiene mucho sentido pero en el proceso en el que aún no nos damos cuenta de que no tiene sentido es en el que precisamente sufrimos, lloramos porque duele, duele muchísimo. Pero si uno se pone a pensar creo que esa tristeza no es más que el ego resistiéndose a aceptar un fracaso, porque “fracasé”, “¡yo fracasé!”; viene entonces la culpa y la auto discriminación, “seguramente yo no fui suficiente”, o “yo hice tal cosa”, “me lo merezco”,  “yo no soy buena persona”, “no he sido buena persona y estoy pagando”, “yo yo yo…“ EGO, puro ego herido, entonces ¿quién llora? ¿Quién realmente está sufriendo?

Voy a ser honesta y decir, yo pensaba que era el corazón herido quien lloraba, yo pensaba que eso que me dolía tan profundamente no podía salir de otro lado, yo pensaba, pensaba que lo que sentía provenía de un lugar, pero yo al pensar estoy empleando mi mente, y es mi mente la que está generando ese dolor. Ese dolor proviene del ego, es el ego quien se hirió, porque todos fracasamos y en el transcurso de ese fracaso aprendemos cosas nuevas. Los desastres proveen creatividad.

¡Y bueno! Entre hilos atados, retazos botados, remiendos autocompasivos inconscientemente creados… Yace algo muy vital, algo que se llama decisión… ¿Qué es lo que quiero? ¿Quiero vivir así el resto de mi vida? Posiblemente todos pensemos y creamos que no, ¿pero actuamos acorde? Posiblemente vivir de esa manera el resto de la vida no genere felicidad en absoluto y la vida pierda sentido, porque vivir así no es vivir seriamente.  Por lo tanto llego a este punto, si quiero encontrar cosas que duelen es obvio que las voy a encontrar porque existen, siempre existe esa posibilidad y siempre el que busca encuentra. Si quiero encontrar excusas ahí van a estar esperándome nada más para que yo las emplee, lo que sea que quiera lo voy a conseguir, está en la voluntad  lo que cuenta.

Hoy digo, no deseo, no quiero, no voy a seguir moviendo hilos para que  me los muevan de vuelta ni señalando los puntos que se supone ya no tienen que importarme. No tiene por qué algo que ya fue seguir siendo, si algo pasa o no pasa respecto a lo mismo, hace o no hace, si cambió o no cambió, si hay  enojo o no, no me interesa. En síntesis ya no quiero estar involucrada; no lo estoy, no quiero estarlo, no lo estaré. Dejémonos de llamarnos a la puerta, dejemos de pensar que usted y yo estamos unidos, que él y yo, usted y ella o él, ¡cómo sea! Dejemos de falsear que nos importa el otro, dejemos el rencor de usted me hizo o no me hizo esto o aquello, dejemos de pasarnos de la línea, y si la otra persona la sobrepasa me haré la loca, hágase el loco o la loca, no porque se es tonto sino porque al final, al menos a mí, no me interesa involucrarme más. Sencillo.

No quiero saber si existe o no existe, pese a las circunstancias que sean. No le deseo ningún mal y tal vez me cueste aceptar sin ego previo y con honestidad que le deseo el bien, así que mejor no le deseo nada. No quiero pensar en usted, no me interesa tampoco si usted piensa en mí. Si habían hilos los rompo, si habían cosas mías ahí me haré a la idea que no existen más, si un día se da la oportunidad y las tengo de vuelta serán como nuevas (mejor aún) y si no, no habrá decepción tampoco. Quiero romper el lazo, no es un nunca jamás, es aquí no hay historia, usted y yo hoy no tenemos historia y hoy es todo lo que cuenta.
Mi parla de hoy es  esta. Ya no quiero estar involucrada, quien quiera estar que esté, no es mi caso por ahora. Es todo lo que tenía que decir. (:

Posdata: Si alguna persona cree que escribí esto por ella (X persona, quién sea), voy a aclarar un punto muy sencillo. Esto lo escribo por una situaión mayormente más amplia en mi vida, lo escribo porque necesité dejarlo ir, la persona que puede estar involucrada en este caso estoy casi 100% segura de que ni se mete a mi blog mucho menos a leer algo, en ese caso me curo en salud y quien quiera pensar lo que sea que lo piense tomando en cuenta esto expuesto aquí. Si resulta que fallo con mi seguridad sobre el implicado real no tengo nada más que decir que lo que ya he dicho. Gracias (;

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