Desafío callejero

Camina una señora con vestido de botones frontales, estampado con flores, insinuación de senos, falda por arriba de las rodillas por cuatro dedos, sombrero, uñas pintadas, ojos delineados color azul cielo, blanca con bronceado caramelo, tacones elegantes y compras en las manos, cuarenta y resto.

Camina un señor, bien hecho, en jeans con trecho, camisa vaquera, zapatos mas o menos, rasurado no muy viejo, treinta y resto, cabello corto y lacio, espejuelos, picardía y cacería de amuletos.

Y las historias se cruzan en duelo.

El señor se le queda mirando desnudando con sus ojos su cuerpo, la señora absorta le clama apuntando con sus dedos:

Señora: ¡Qué osadía!

Señor: ¡Qué alegría!

Señora: ¿Viene o se va?

Señor: Umm ¡Me vengo! Y me voy...

Señora: Ay ¡qué vida de dobles sentidos!

Señor: No se atormente y déjele el trabajo a su libido

Señora: -¡Cochino!

Señor: -¡Cochinísimo!

(Guiña un ojo y utiliza sabor al decirlo)

Señora: (roja) -No tiene usted vergüenza

Señor: -La vergüenza no me disfraza

Señora: -No tiene usted remedio alguno

Señor: -Pero ¡Si yo soy el remedio suyo!

Señora: -¡No diga más tonterías!

Señor: -¡Usted me pone en cacería!

Señora: -¡Déjeme tranquila!

Señor: -Déjese de niñerías...

Señora: Usted tan maduro...

Señor: -Puede usted probarme y no se arrepentirá se lo aseguro

Señora: -No me venga jugando de ricura

Señor: -La invito, venga a desintegrar su agrura

Señora: -Es usted un descarado

Señor: -¡Y no se imagina cuánto!

Señora: -¿Qué acaso no existe para ud la pena?

Señor: -La pena que siento señora, es ajena...

Señora: -¡Respéteme!

Señor: -A mí mejor no me respete, cuanto más pueda, ¡irrespéteme!

Señora: -Mejor me voy...

Señor: -Y yo con usted también me voy...

Señora: -No se le ocurra seguirme

Señor: -Caminaré tras suyo aún sin erguirme...

Señora: -Qué corriente...

Señor: -Cómo miente...

Señora: -¿Y ahora por qué?

Señor: -¡Porque está que arde!

Señora: ¡No señor!

Señor: -Déjeme y le demuestro su calor

Señora: -Ni lo intente, busque vida

Señor: -Cómo se nota que si lo hago se moriría...

Señora: -NO sea usted tan atrevido y mentiroso

Señor: -Me le acerco y todo le mojo

Señora: -Vulgar asqueroso

Señor: -Honesto en demasía y algo mañoso

Señora: -Sobre todo...

Señor: -Primero conózcame y luego tire lo juicioso

Señora: -No gracias, no hace falta

Señor: -Ya le dejé la espinita en la espalda...

Señora: -¡No se engañe!

Señor: -Señora, morena caramelo, USTED no se engañe

(Se le acerca y le pega un mojado beso, labios suaves y perversos, despacio delineándole deseo con su lengua en apogeo)

(Señora sin saber reaccionar suelta de sus manos sus compras y se queda intacta)

Después del prolongado beso...

Señor: ¿Sin palabras?

(Señora se muerde su labio y lo mira con fuerza)

Señora: Pero encendida y pidiendo sexo...

(Señor sonríe de medio lado y se va lejos...

Lejos le guiña un ojo

Señora jadea y suspira, turbia, recoge sus compras, camina con ira pero con deseo, camina enfriando su estado, se aleja en dirección opuesta marcando su paso)

(De lejos el señor le tira un beso)

 Ana Lía Casvar