me las trae día a día el correo del delirio;
Escríbeme tu historia cuando quieras, para no olvidarte,
para que no me olvides.
Sigue gastándote en derroche el poco azul de cielo que aun me cubre,
sigue intentando jugar con mi corazón, o eso que hace siglos no poseo,
o eso que hace siglos perdí.
Las risa que me robaste en los últimos días de la guerra,
yace en los jardines del Olimpo, enraizada de de venas secas
y podridas por los años.
Juega conmigo mujer que me fascina verte,
juega que me gusta que creas hacerlo sin muros,
juega con mi sueño y con mi insomnio provocado,
corta el espesor del aire acalorado de mi habitación
con tus afiladas manos de gitana traicionera
mientras leyendo algún libro de no sé que, camino de tu mano.
No me cambies, véndeme al mejor postor al menos.
Sigue cantándome el bolero repetido y mentiroso que me mata,
que vuelve a ser mi pan de cada día,
que es soplo arrasador de nubes que ocultan mi Luna en medio día,
sigue jugando conmigo, sigue jugando con tu suerte
que me tienes en el aire, mas te veo desde el suelo en tu trapecio sin red.
Sigue jugando con mi corazón que no poseo, sigue jugando con tu suerte
mientras algún pintado amanece contigo, yo sé que me vaticinas a tus pies.
Imprégname de la vista frívola de tu amanecer,
y del calor que sientes cuando me lees por encima del hombro,
de los brincos envenenados que vienen del sur
y te hacen vibrar cual trozos de mi piel en tinta para ti.
Desnúdame las ganas que tengo de huir de aquí,
del peligro inminente que siento en cada poro de mi cuerpo,
Despójame del corazón que ya no tengo,
que no tendrás;
Has una sátira de mis sentimientos y de la luz que irradia mi alma,
si es que aun está en mi, y tatúate en la palma de la mano
las sonrisas disparadas a las niñas de tus ojos.
Conjúgame en un verbo falto de razón
y luego déjame escondido entre la nada,
una vez más.
Escríbeme tu historia cuando quieras, para no olvidarte,
para que no me olvides.
Sigue gastándote en derroche el poco azul de cielo que aun me cubre,
sigue intentando jugar con mi corazón, o eso que hace siglos no poseo,
o eso que hace siglos perdí.
Las risa que me robaste en los últimos días de la guerra,
yace en los jardines del Olimpo, enraizada de de venas secas
y podridas por los años.
Juega conmigo mujer que me fascina verte,
juega que me gusta que creas hacerlo sin muros,
juega con mi sueño y con mi insomnio provocado,
corta el espesor del aire acalorado de mi habitación
con tus afiladas manos de gitana traicionera
mientras leyendo algún libro de no sé que, camino de tu mano.
No me cambies, véndeme al mejor postor al menos.
Sigue cantándome el bolero repetido y mentiroso que me mata,
que vuelve a ser mi pan de cada día,
que es soplo arrasador de nubes que ocultan mi Luna en medio día,
sigue jugando conmigo, sigue jugando con tu suerte
que me tienes en el aire, mas te veo desde el suelo en tu trapecio sin red.
Sigue jugando con mi corazón que no poseo, sigue jugando con tu suerte
mientras algún pintado amanece contigo, yo sé que me vaticinas a tus pies.
Imprégname de la vista frívola de tu amanecer,
y del calor que sientes cuando me lees por encima del hombro,
de los brincos envenenados que vienen del sur
y te hacen vibrar cual trozos de mi piel en tinta para ti.
Desnúdame las ganas que tengo de huir de aquí,
del peligro inminente que siento en cada poro de mi cuerpo,
Despójame del corazón que ya no tengo,
que no tendrás;
Has una sátira de mis sentimientos y de la luz que irradia mi alma,
si es que aun está en mi, y tatúate en la palma de la mano
las sonrisas disparadas a las niñas de tus ojos.
Conjúgame en un verbo falto de razón
y luego déjame escondido entre la nada,
una vez más.
Pablobombe
NO es mío, está firmado como Pablobombe un compa. Lo comparto en la sección de "De terceros cercanos" para que disfruten
ResponderEliminar